El parto es, seguramente, el momento que te da más miedo de afrontar de todo el embarazo, pero también es uno de los momentos más especiales y únicos, porque te llevará a ver por fin a tu bebé. Es normal que te haga respecto y que te preguntes si todo saldrá bien, si te hará daño, o qué puedes hacer tú para ayudar al bebé a salir.
Cada parto es diferente, como cada chica y cada bebé. Algunos aspectos del parto no se pueden elegir y vienen dados por lo que recomienda el médico, por ejemplo una cesárea o un parto inducido. Pero hay otras cosas que puedes escoger, cómo hacer un parto natural o dentro del agua.
Lo más importante es que tengas la información suficiente para poder elegir como quieres que sea este momento tan especial.
El parto natural
Es aquel en el que no se utiliza ningún tipo de medicación en el momento del parto, ni siquiera la anestesia (epidural). Algunas chicas escogen esta opción para que prefieren no utilizar fármacos durante el parto, ser conscientes del momento y conducir ellas mismas el proceso de dar luz de la forma que les resulte más cómoda.
Esto no quiere decir que un parto natural no necesite supervisión médica. La seguridad durante el parto es muy importante porque ni la madre ni el hijo o hija sufran.
El parto por cesárea
La cesárea es una intervención quirúrgica (una operación) que se practica con anestesia epidural. Consiste en abrir el abdomen y el útero de la madre para dar luz al bebé. Puede ser programada con antelación o puede que el personal médico decida hacerla en el último momento, incluso durante el parto.
Parto acuático
Es un parto natural pero que se lleva a cabo en el medio acuático. Sólo la pueden poner en práctica las chicas que tienen embarazos de bajo riesgo.
Se trata de una manera más relajada de dar a luz con la que el hijo o hija no se separa de la madre. Sin embargo, si decides elegir esta opción, debes consultar con tu médico, que te orientará sobre si es o no posible en tu caso.
Parto vaginal
Es el parto que llevan a cabo la mayoría de las embarazadas, en el que el bebé sale al exterior a través de la vagina de la madre. Tal y como hemos explicado antes, puede ser natural (sin medicación) o bien asistido con varios instrumentos especiales (como los fórceps o la pinza obstétrica) en casos de partos más complejos.
Parto inducido
Se lleva a cabo en varios casos como los embarazos de más de 42 semanas, cuando hay un desprendimiento de la placenta, infecciones u otras causas. La decisión de provocarlo es de los médicos.
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Otros aspectos que puedes elegir son: el lugar del parto, la postura, el uso de epidural (anestesia) o las personas que estarán contigo en el momento del parto. Todos estos temas los puedes ir hablando con el o la profesional que te atiende.
